En un momento de uno de los partidos, nuestro equipo iba ganando cuando uno de los balones se va de la cancha y traspone el tejido perimetral del predio. El árbitro presuroso pide a los colaboradores otro balón. Al no haber otro esférico disponible, observa a cada uno de los jugadores y le dice a Faiad: "No se haga el gracioso señor. Sáquese la pelota que tiene debajo de la camiseta"
Grande fue la vergüenza del árbitro al comprobar que su acusación había sido infundada y que el bueno del Turco, solo tenía su abdomen debajo de la camiseta.
Aflojando con el locro !!!
Grande fue la vergüenza del árbitro al comprobar que su acusación había sido infundada y que el bueno del Turco, solo tenía su abdomen debajo de la camiseta.
Aflojando con el locro !!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario